Prevención de abuso y maltrato en la infancia.
Página comunitaria sobre Ayuda Mutua

Familiar o pareja de un sobreviviente de abuso sexual en la infancia?

Guía para las parejas
Título original: Guide pour les conjoints
Redactado por Vancouver Incest and Sexual Abuse Centre (VISAC)

Dedicado a los cónyugues de una víctima de violencia sexual : Si eres un hombre o una mujer en íntima relación con una persona que haya sido sexualmente agredida en la infancia o durante su adolescencia, este manual te ayudará para poder comprender los efectos de la violencia en tu cónyugue y por consiguiente en vuestra relación. Esta obra pretende responder a las interrogaciones más frecuentes y demuestra por medio de relatos personales lo que los supervivientes y su cónyugue podrán experimentar en las distintas etapas del proceso de convalescencia. 1994, 18 páginas.


Esta guía aborda los temas siguientes :

¿ Porqué esta guía ?
¿ Qué es la violencia sexual hacía un niño ?
¿ Qué significa haber sufrido violencia sexual en la infancia,
es decir : « ser un/a surperviviente » ?
¿ Mi compañero/a podrá recuperarse de la violencia sexual padecida ?
¿ Reaccionan de verdad como yo otros, otras compañeras ?
¿ Qué apoyo va a poder brindarle el cónyugue de un/a surperviviente ?
¿ Y luego, yo ? Cómo satisfacer mis propias necesidades ?
¿ Qué pasa si soy también yo un/a superviviente ?
¿ Qué es un grupo de apoyo para cónyugues ?
¿ Cómo un grupo así puede ayudarme ?
¿ Qué ocurre cuando mi compañero/a y yo somos del mismo sexo ?
¿ Qué efectos tendría en nuestra relación una curación total ?
¿ Qué efectos tendrá el tratamiento sobre nuestra familia ?
¿ Hay de verdad una « vida despues » ?



¿ Porqué esta guía ?

Si estás viviendo una relación íntima con alguien que haya sido victima de violencia sexual en la niñez o adolescencia, este fascículo te es dedicado. Las informaciones que contienen pueden ayudarte, seas hombre o mujer, seas homosexual o heterosexual.No estais solos, tu compañero/a y tú. Al menos una mujer de cuatro y un hombre de entre seis han sido víctimas de violencia sexual en la niñez. Cuanto más abiertamente hablen los supervivientes adultos sobre la violencia sexual que han padecido y sobre cómo fueron afectados, más su compañero/a podrá llegar a comprender porqué esta experiencia influye sobre la relación.La violencia sexual afecta todo el desarollo emocional de la persona y, por consiguiente, los aspectos que siguen pueden resultar dificultosos para cada uno :
CONFIANZA : un niño vive la agresión sexual como traición hecha a su confianza, cuanto más si el agresor era una persona querida. Despues de semejante experiencia, es posible que tu compañero/a tenga gran dificultad para volver a confíar en alguien o en decidir en quién poder confíar de nuevo !
PODER : un niño víctima de violencia sexual se siente impotente. Como adulto, tu compañero/a puede seguir sintiéndose impotente o incapaz de afirmarse, por momentos. En cambio, será capaz de intentar dirigirlo todo en sus pormenores, en otros momentos, con el fín de sentirse más seguro o darse la impresión de tener un cierto poder.
INTIMIDAD : un niño víctima de violencia sexual tiene un miedo visceral a la hora de poder revelar su secreto y se muere de vergüenza como para poder dejar nadie tejer con él unos lazos estrechos. Tiene aprendido cómo comportarse escondiendo sus verdaderos pensamientos o sus sentimientos auténticos incluso hacía él mismo : prefiere fingir que todo va bién. Le es, pues, muy difícil, una vez adulto, establecer relaciones íntimas.
SEXUALIDAD : la violencia sexual memorizada es una traba a la hora de poder desarrollar normalmente su sexualidad. Al crecer, en vez de considerar al cuerpo fuente de placer, tu compañera quizá lo haya ido considerando como fuente de dolor. Puede considerar la relación sexual como una forma de dominación y no como un medio de expresar amor. Por consiguiente, ella puede rechazar las relaciones o, tal vez, utilizarlas para ganar en poder o ganarse tu cariño.


En este fascículo, usamos los pronombres ella y la cuando hablamos de la víctima surperviviente y los pronombres él y le cuando hablamos del agresor. Tomamos esta decisión por dos motivos : en primer lugar, para facilitar la lectura y, en segundo lugar, porque las estadísticas indican que las mujeres son más habitualmente víctimas y los hombres más habitualmente agresores. La información, sin embargo, se aplicará de igual manera a los cónyugues y a los supervivientes de los dos sexos.Aúnque demos aquí una definición breve sobre la violencia sexual, no intentamos explicar esta violencia. Nos concentramos más bién sobre sus efectos en tu compañero/a y en vuestra relación. Os incitamos a leer cuanto más sobre la manera que la gente ha encontrado para liberarse de la violencia sexual que padecieron.

En la página 19, os recomendamos determinadas obras que pueden ser útiles.Por otro lado, os indicamos también aquí cómo poder reaccionar a lo largo del proceso de curación del cónyugue. Te será, quizás a veces, difícil el no dejarte invadir por los problemas. Prueba buscando apoyo fuera : de un amigo, de un sicólogo, en un grupo de apoyo. Aquello te dará una buena oportunidad para concentrarte en tus propios sentimientos y pensamientos.


¿ Qué es la violencia sexual hacía un niño ?

La violencia sexual hacía un niño es un abuso de poder de parte de un adulto o de parte de un adolescente sobre ese niño, con el fín de obtener una satisfacción sexual. El poder de la persona infligiendo su violencia sexual puede proceder de su edad o porque es más grande o más experimentada o por una posición de preferencia por la confianza o por la autoridad que ejerce sobre el niño. El término violencia sexual se extiende desde commentarios indecentes, pasando por las carizias y hasta las agresiones. Que tu cónyugue haya experimentado los comentarios humiliantes, una interacción con carácter sexual que le haya dejado mal, o unos tocamientos sexuales una sola vez, o bién una agresión sexual extendida en un largo período de tiempo, repetidas veces, lo importante es su manera personal de vivir dicha experiencia y de reaccionar a ella.
Creciendo en surperviviente, tu cónyugue, probablemente haya supuesto esas conclusiones :
1. No se puede confíar en las personas que supuestamente nos quieren.
2. Las atenciones o las señales de afecto vienen acompañadas por señales de orden sexual.
3. No tiene una derecho a ser dueño de su propio cuerpo.
4. Las necesidades de los demás pasan antes que las nuestras.
5. Hay siempre peligro cuando ne se domina una situación del todo.

Estas son las secuelas que deja habitualmente la violencia sexual y pueden afectar profúndamente tu cónyugue en su relación con los demás.


¿Qué significa el hecho de haber sufrido violencia sexual en el transcurso de la niñez, es decir: «ser un/a surperviviente » ?

Numerosas personas, víctimas de violencia sexual en su niñez, quieren que hablemos de ellas como tal, mejor que denominarlas como «víctimas ». Dicho término significa para ellas que la violencia hacía ellas finalizo y que han sobrevivido ! Como es habitual, tu cónyugue probablemente no te dijo, al inicarse vuestra relación, que era ella superviviente de una agresión sexual. Si tal es el caso, es porque quizá tenía miedo de verse rechazada o que no la creyeras. Se sentía quizás demasiado culpable o le daba vergüenza hablar de ello. También, quizás, podía pensar que dicha experiencia no le había afectado y que no valía la pena hablar de aquello. También podría ser que los recuerdos se encontraran disimulados en su infancia y que no hayan aún vuelto hasta la superficie. Sea cuál fuere la razón de dicha omisión, tu cónyugue no quizo lo que le sucedió y que afecta ahora profúndamente vuestra relación.


¿ Mi compañero/a podrá recuperarse de la violencia sexual padecida ?

SI !! Tu cónyugue puede curarse aúnque le coga tiempo. Su curación dependerá del tipo de violencia sufrida y también del tipo de apoyo del que pueda beneficiar. No podemos, sin embargo, hablar de una duración «normal» de curación o de desarollo «normal» de la curación. Diremos que la mayoría de los supervivientes pasan por tres etapas :

Etapa de crisis

«Cuando empezó aquello, todo fue muy duro. Annie dormía mal. Tenía pesadillas. Despues de un tiempo, se negó a accostarse. Yo me iba solo a la cama. Ella se quedaba despierta, leyendo. Amenudo, me despertaba yo en plena noche, solo en la cama. Annie seguía en el salón, con las luces encendidas, enrollada en una manta.»

Cuando empiecen los recuerdos de la violencia sexual que ella padeció, tu compañera quizá inicie una auténtica crisis. Los recuerdos de dichos acontecimientos pueden aflorar por partes que no ofrezcan sentido alguno. En su lucha contra ellos, podría ella dudar completamente haber de verdad sufrido cualquier violencia sexual y llegar incluso a preguntarse si se está volviéndo loca. Pues no, no estará volviéndose loca : es sólo que su mente dejará que filtren informaciones trozeadas, eso de forma que no se siente hundida.Si tu cónyugue siempre supo que había sufrido violencias sexuales aúnque sin reconocer sentimiento alguno con respecto de su experiencia, puede que sufra una crisis en el momento de experimentar el sufrimiento emocional ligado a dicha violencia. Puede que se ponga a llorar sin entender el porqué y que empiece a tener miedo de quedarse sola. La etapa de crisis sera más fácil de superar si podeis entender lo que está pasando. Con este fín, no dudeis en llamar un centro de ayuda para víctimas de agresión sexual, pidiendo el nombre de un consejero que os pueda escuchar.
 

 
Etapa intermedia

«No dejaba ella de hurgar en el pasado : creí que nunca lo dejaría. Era como si tuviera que recordar cada momento y toda la gente que haya importado en su vida para volver sobre ellos una y otra vez. Necesitaba removerlo todo para saber que había sido la realidad de su infancia y lo que realmente había sido de su historia familiar. »

Desde el momento en que tu compañera decide hacer frente a la violencia sexual que padeció, se encamina en un viaje emocionalmente penoso. Va a tener que luchar para remover los detalles de dicha violencia, para distinguir los sentimientos experimentados y para poner orden en sus sentimientos. Aquello significa tener que reconocer hasta qué punto la violencia sexual que padeció le afectó. Vivirá un terremoto emocional en el cual penas e ira se succeden. Puede que se siente liberada, por el contrario, cuando vaya a comprender al fín la naturaleza de determinados sentimientos suyos y comportamientos.

Quizá podrías desear que tu compañera se dé prisa en curarse : sólo sucederá cuando esté lista. Si se preocupa ella de no verle la salida, anímala a entrar en contacto con otras supervivientes o a leer algún que otro relato de superviviente. En el caso que se preocupara de los efectos posibles de esta crisis sobre vuestra relación, siempre podreis consultar juntos un sicólogo para comentar sus problemas y de cómo superarlos.No presiona tu cónyugue : las decisiones que tomar durante el proceso de recuperación no van a ser fáciles y tendrá que tomarlas para sí misma, no para darte gusto, desde luego. Si te sientes impaciente o frustrado, consulta o entra a participar en un grupo de apoyo.


Etapa de resolución del problema

«Pasamos por un período muy duro pero todo es más fluido ya. La violencia sexual que padeció es una experiencia a la que nos referimos a veces pero no es ya ni el centro de su vida ni de la mía. Que liberación ! »

Con trabajo, tu compañera alcanzará la resolución de buena parte de los problemes mayores. Ello no significa que deje completamente de pensar en aquello y que todo sea ya claro y limpio en su mente. Sin embargo, se encontrará ya lo bastante libre para concentrarse sobre lo quotidiano. En caso que vuelvan los problemas derivados de la agresión, confíará en poder con ellos. Como cónyugue, tendrás un papel importante en cada etapa del proceso de curación. Conocedor de las distintas etapas, podrás ayudar tu compañera sin sentirte ya impotente frente a sus reacciones.




¿ Reaccionan de verdad como yo otras, otros compañeros ?

«Simplemente, yo no puedo creer que le haya hecho todo eso su propio hermano mayor: jugaba al futbol con él ! Juntos, tomabamos copas y nos contábamos chistes. Para mí, es un chico normalísimo. Quizá le agredió otro tipo y se imagina simplemente que era él ?»

Negarse en creer es una reacción corriente de alguien que acaba de oïr tan fuerte revelación. Si este es tu caso, las estadísticas sobre agresiones sexuales deberían acabar convenciéndote : según los estudios más recientes, una mujer de cuatro y un hombre por cada seis son supervivientes de abuso sexual. Dada la vergüenza asociada a la agresión, es rarísimo que la gente fantasmee públicamente.

Puedes sentir repugnancia frente al acontecimiento y puedes rechazar de admitir que tu cónyugue haya padecido agresión sexual. Date sólamente cuenta que a él o ella le habra costado mucho más probablemente el recuerdo de todo aquello y que lo considerará como una enorme vergüenza en su vida. Si crees en él o ella, eso le permitirá franquear la primera etapa de recuperación. En contra, si te niegas, coges el riesgo de ampliar su vergüenza.

«¡ Bién ! Creo en ello. Pero basta ! ¿Porqué no podría ella dejar de pensar en ello todo el rato y mejor gozar de la vida a diario ? Nos sentiríamos ambos mucho mejor : no podemos reconstruir lo pasado. Lamentarse sobre el destino no hace sino empeorar las cosas. Podríamos arrancar desde ahora con mejor disposición anímica y vivir juntos una vida aún feliz. »

La tentatión es fuerte de minimizar la violencia sexual y sus consecuencias pero aquello no resuelve nada. El hecho de recordar sus experiencias et de poder hablar de ello contigo constituye sólamente para tu compañera une primera etapa de su recuperación. Ella DEBE ahora volver a vivir las emociones que habían sido profúndamente ocultadas con el fín de comprender los sentimientos contradictorios que ha ido experimentando. Para ello, necesitará probablemente ayuda de un profesional especializado en esta violencia sexual. Necesitará de tu paciencia, de tu comprensión y de tu amor.

«La patiencia y la comprensión son una cosa pero vayamos directamente a la raíz del problema y actuemos : su hermano arruinó su vida pero hoy en día está arruinando la mía. Ya es tiempo que tome consciencia de ello y mejor que sea radicalmente preferentemente.»

Tu ira en contra del agresor se puede comprender pero no va a ayudar en nada tu compañera. Ella necesita decidir de por sí misma la marcha que crea ser la mejor. Durante sus horas de sufrimiento profundo, en plena violencia sexual, se encontró impotente. Si intentaras tomar las riéndas, le quitarías su poder de autonomía de nuevo. Existen vías constructivas para canalizar tu ira. Una de ellas consiste en brindar tu apoyo a tu compañera en sus decisiones. Otra forma para ello consistiría en ayudarle en una denuncia judicial y demanda en contra del agresor.

«Todo iba bién hasta el día en que vió esta emisión televisiva. Ni siquiera había pensado en violencias sexuales hasta escuchar aquellas mujeres hablar sobre ello. Actualmente, no deja de comentarlo.»

Puedes experimentar hacía tu compañera un sentimiento de ira porque ella se pone a hablar de sus vivencias y luego sentirte culpable por ello… ¿ Porqué no intentes orientar esta ira hacía un blanco más acertado o sea el agresor mismo ?

«Yo sabía que algo no iba bién entre nosotros pero no llegaba a encontrar el qué. A veces, se negaba a hacer el amor. En otras ocasiones, parecía desear hacer el amor todo el rato. Me daba la impressión de que no podíamos nunca relajarnos simplemente, tomarse el tiempo. Luego, de repente, empezó a reprocharme de hablar con otras, como si tuviese aventuras con ellas. Luego, se pasaba el tiempo en decir que la iba a abandonar. ¡ Me estaba volviéndo loco !. A Dios gracias que terminase por recordar lo de los abusos sexuales que padeció ! Ahora, todos estos comportamientos extraños cogen sentido. »
Te sentirás liberado probablemente en el momento que tu compañera haya empezado a comentarte la violencia sexual que padeció. Eso te ayudará a entender unas actitudes que te pueden haber despistado durante años. Problemas a nivel de sexualidad, de vida íntima y de confianza se deben amenudo a la violencia sexual padecida durante la niñez.

«Me alegro que hable de ello y me siento feliz por poder comprendre algo más sus actitudes ¿pero que debo hacer ahora ? Yo no soy titulado en sicología.y me asusta poder decir o hacer algo que pueda causerle más daño. Es más : ¿ que pasa si hago cosas en la cama que la contrarien ?»

Como cónyugue de superviviente de agresión sexual, puedes sentirte mal a gusto. Cuando tu compañera este ya en via de recuperación, observarás quizá cambios en su personalidad y en su forma de ser en el plano de la sexualidad. Recuerda que no eres la causa de esos cambios y que no deberías sentir culpable de nada.

« ¿ Porqué sufro yo así ? Se sigue tratando de la misma persona y sigo enamorado de ella pero me aparece tan distinta. Es como si viviese con una extraña. Echo de menos la mujer que conocía. Sé que va mejorando pero ¿ que puedo hacer ? »

Quizá te de pena verla cambiar pero no te olvides de que su personalidad profunda sigue la misma. Experimentar esos cambios puede ser tan excitante para tí como para ella. Debes confíar en su recuperación y tener patiencia



¿ Qué apoyo va a poder brindarle el cónyugue de un/a superviviente ?


En cualquier relación amorosa, los dos cónyugues deben comprenderse y brindarse un apoyo mútuo. El cónyugue de una superviviente necesitará mayor dosis de comprension y de patiencia. Aquí tienes ejemplos de lo que vas a poder hacer para brindarle mejor apoyo :

 
1. Debes creer en ella y resistir a la tentación de minimizar la importancia de los abusos que padeció, aún cuando la realidad no es bonita. Los supervivientes de agresión sexual sienten normalmente vergüenza al estar cuestionados.
2. Debes escucharla sin ponerla en tela de juicio. Ya que si el agresor es un pariente, la superviviente puede experimentar hacía él ira y algo de amor. Ella debe poder ajustar su opinión sin que nadie influya.
3. Debes brindarle apoyo en la forma que ella entienda solucionar sus problemas con la violencia sexual y no intentar darle directivas en lo que va haciendo. Le toca a tu compañera decidir si va a seguir un counseling o entrar en un grupo de apoyo o demandar judicialmente su agresor. Tu tarea consiste en apoyarle en esas importantes decisiones sean cuales sean. Si intentas meterte en sus decisiones, ella va de nuevo tener la impresión que alguien quiere manejar su vida. Si la familia de tu compañera intenta influir en las medidas que proyecta aplicar, podrás ayudarle apoyando sus decisiones.
4. Debeis ambos conservar cada uno su identidad propia. Ayudarás tu compañera en concentrandote tanto en tus necesidades propias que en las suyas. En una relación sana, cada miembro de la pareja debe actuar de manera que sus necesidades no tengan prioridad sobre las necesidades del otro. Caso de un solo superviviente o de dos en la pareja, el princípio seguirá aplicándose.
5. Debes ser para ella un amigo en quien tenga total confianza. Lo que significa que deberás estar allí caso que tu compañera necesite hablar o cuando necesite companía y que deberás igualmente respetar su exigencia de soledad. Los supervivientes necesitan repetir amenudo su historia hasta sentirse liberados.
6. Debes demostrar espíritu de colaboración frente a sus demandas en el plano de la vida sexual. Ella puede desear evitar las relaciones sexuales e incluso exigir un período de abstinencia. Si te lo pide, es probablemente porque las relaciones sexuales le recuerdan cosas dolorosas que son ligadas a la violencia sexual que padeció. La abstinencia temporal puede parecer dura pero podrás ver en ello una oportunidad de demostrar tu amor por gestos cariñosos que no tengan carácter sexual.
¿ Y luego yo ? ¿ Cómo satisfacer mis propias necesidades ?


Ser el compañero de una superviviente de agresión sexual puede revelarse tanto una prueba como una experiencia que enriquece : la historia de Greg ilustra aquí un ejemplo de lo que puede suceder mientrás transcurre el proceso de recuperación del cónyugue :

La historia de Greg

Greg conoció a su mujer, Linda, que ya iba a sesiones de counseling porque su abuelo le agredió sexualmente. En cuanto empezaron las relaciones sexuales, pudo observar que no se sentía a gusto ella en la intimidad. Su compañera llevaba pijama para la cama y nunca se dejaba ver desnuda. Greg atribuía esta actitud a un exceso de pudor. Linda era dueña de su empresa de logiciales informáticos mientrás Greg ejercía como soldador. Se sentía valorado de pensar que una «profesional de tanto nivel » se interese a un simple obrero y más que aceptara casarse con él.

Despues de la boda, Linda comentó a Greg lo de su abuelo y Greg le animó en continuar las sesiones de counseling e, incluso, se extendió en comentarios agresivos hacía el abuelo. Se veía a sí mismo como el «caballero blanco » llegado para socorrer la bella de su malvada familia.A medida del progreso en counseling, sin embargo, las relaciones iban deteriorandose entre Greg y su mujer. En vez de sentirse mejor en relación con su propio cuerpo, Linda seguía con sus pijamas y amenudo rechazaba a Greg al que trataba de «obseso sexual » cuando insistía.Un día, Linda atacó a Greg acusándole de intentar controlar su vida, de ser un machista y de flirtear con otras. Greg no tuvo más paciencia y le dijo a su compañera de entregarse a fondo en las sesiones de counseling para que puedan un día tener una vida sexual normal. Linda le acusó entonces de querer presionarle emocionalmente.

Desesperado, Greg fue a consultar. Le fue pedido a Greg meditar sobre las ideas que se había hecho sobre su mujer. Él pudo así descubrir que «tanto pudor » no era sino una reacción frente a la violencia sexual impuesta por el abuelo. El sicólogo ayudó a Greg a relacionar los motivos de acusación de Linda y su manera de percibirle, deformada esta por su desgraciada experiencia. Greg tuvo que admitir, por el contrario, que el papel de «caballero blanco» que se atribuía, era agresivo y basado en una actitud machista y dominante. Linda, por otro lado, no tenía porqué considerarle «como obseso».

Greg pudo tomar conciencia de haber idealizado a Linda por considerarle ser una emprendedora de éxito y de clase superior, que le hubiera, además, hecho un favor al aceptar casarse con él. En fín, que todo aquello poco tenía que ver con la realidad. Al final, Greg pudo darse cuenta hasta que punto su educación había contribuido a disminuir su auto estima. A partir de allí, llegó a ser capaz de brindar un mejor apoyo a Linda porque él mismo se podía valorar de forma más equilibrada.Greg aprendió a no presumir negativamente sobre su posición frente a los ataques de Linda. Cuando pudo hacerse una representación más realista de su compañera, abandonó su papel de «caballero blanco». Linda, por su parte, cuando empezó a poder gestionar su proceso de recuperación, dejó los ataques verbales. Greg, además, comprendió cómo demostrar también su cariño por gestos sin carácter sexual. El counseling seguido por él trajó a los dos cónyugues múltiples beneficios.

Esta historia de Greg pone de relieve determinados princípios que todo compañero de una superviviente puede llevar a la práctica.

Por ejemplo :

1. Aprende a reconocer y a valorar tus necesidades propias. Debes determinar tus límites y dejarlas claras a tu compañera por si se excediese en su actitud. Dejar que las exigencias de tu compañera se antepongan a las tuyas presenta un riesgo para su propia curación tanto como para tu equilibrio emocional.
2. Reflexiona sobre el papel que adoptaste en tu propia familia. Si tú eras quien «se encargaba de todo», corres el riesgo de adoptar de nuevo ese papel con tu pareja. Quizá te hara sentir bién pero no es allí una actitud sana.
3. Asegúrate un apoyo exterior : este apoyo puede serlo un sicólogo, un amigo o un grupo de apoyo o las tres cosas.
4. Abstente de suposiciones en cuánto a tu compañera y a tí mismo ni te dejes influenzar por unos estereótipos. Es esencial cuestionarse y verificar sus hipótesis.
5. Sepas valorar vuestra relación por lo que es de verdad : no trates de conformarla según la idealización de un modelo. Puede que tu familia haya creado en tí una falsa imagen de la vida familiar. Es conocidísimo que las comédias televisivas crean expectativas irrealistas en cuanto a lo que debería representar nuestra vida familiar.
 
¿ Qué pasa si soy yo también un superviviente ?

La historia de Jill

Mis padres consumían ambos demasiada bebida alcoholica. Yo, siendo la mayor de la familia, me ocupaba de todos. Hacía lo que faltaba sin preguntar jamás pero con la impresión que nadie se preocupaba de mí. Cuando terminé mis estudios, me enamoré locamente de Jack. Nadie como él en la vida me había necesitado tanto… Despues de un maravilloso año juntos, Jack empezó a tener reminiscencias sobre abusos sexuales en la infancia. Intenté ayudarle pero con rencor : me parecía injusto que despues de encontrar finalmente alguien que me quisiera de verdad, me viese obligada a enfrentarme con un problema tan grave. La familia de Jack probó con prestarme apoyo pero yo era la única persona en quien Jack confiaba. Escucharle me agotaba. En seis meses, había consumido completamente toda mi energía. A continuación me submergiéron mis propios recuerdos : yo también había sido víctima de violencias sexuales. Estaba aterrada al representarme cuánto apoyo Jack había necesitado. Me angustiaba saber quién iba a poder asumirme como hizo falta para él. Mi familia seguro que no ! Me sentía a punto de derrumbarme y me preguntaba quién me vendría a recoger. No podía hablar con nadie. Yo guardaba todo para mí. Me ponía mala contínuamente, siempre enferma. Hasta que acabé comentándolo con mi médico la cual estuvo conmigo fenomenal ! Me ayudó para encontrar apoyo y dónde recibir el counseling que necesitaba y me sentí mejor en seguida.

Empecé a darme cuenta hasta qué punto el año había sido duro. Lo había asumido todo sin pedir ayuda porque era lo que pensaba tener que hacer de niña. Nadie nunca se preocupaba de mí y pensaba que las cosas así debían seguir siempre. Ahora veo que estaba equivocada. Recibí ayuda de mi médico, de mi sicólogo, de mis amigos y de mi compañero. Fue una liberación poder confíarme a Jack y estuvo conmovido al darse cuenta que tenía las mismas necesidades que él. Supongo que, hasta entonces, nous comportábamos un poco como madre e hijo. Desde este momento, yo aprendí a pedir ayuda y él aprendió que algo me podía dar…

Si el proceso de recuperación iniciado por tu compañera llama a tu memoria determinados recuerdos ligados a la violencia sexual que padeciste, podrías experimentar reacciones tales como la ira porque pensaras que la experiencia de tu compañera saca tus propios recuerdos a la luz, o el miedo acaso por no poder continuar brindando el mismo apoyo a tu compañera, o el pánico por pensar que vas a vivir lo mismo que tu compañera acaba de vivir. Si piensas que la violencia sexual que padeciste era menos grave y que tus necesidades pueden esperar, vas a crear un problema mayor en tu pareja votre relation.

La recuperación de tu compañera podría tomar mucho tiempo y podrías ser preso de la ira y de rencores poniéndo de lado tus necesidades. Recuerda una cosa : tu responsabilidad fundamental, eres tú mismo. Si no tomas cuidado de tí mismo, no podrás brindarle a tu compañera el apoyo necesario o a tu relación con ella el cuidado necesario. Ya que cada uno de vosotros es tanto un superviviente como compañero de un superviviente, debeis, cada uno a su vez, poder dar y recibir apoyo. Además, cada uno de vosotros también necesitará un apoyo desde fuera, que sea de amigos, de un sicólgo o de un grupo de apoyo.



¿ Qué es un grupo de apoyo para los cónyugues ?


Un grupo de apoyo para las pareja está compuesto de cónyugues de supervivientes adultos. Algunos de esos grupos de apoyo están bajo la dirección de profesionales mientrás otros llamados «grupos de ayuda solidaria», están co-gestionados por los participantes. Determinados grupos se forman para mujeres exclusivamente, otros para hombres y otres son mixtos. En la mayoría de tales grupos, los participantes se reúnen una vez por semana con el fín de ayudarse mútuamente para pasar los períodos más dificiles.

En esas reuniones, los participantes comentan habitualmente lo ocurrido durante la semana y de sus problemas, de sus frustraciones, de sus éxitos. También se communican nuevas informaciones sobre la violencia sexual. Nadie está obligado de hablar y todo lo dicho allí queda como confidencial.



¿ Cómo puede ayudarme un grupo así ?


Tienes la oportunidad de expresar tus sentimientos y tus frustraciones y de sacar provecho de lo que los demás cuentan. Te animarás al oïr otros participantes más adelantos en el proceso cuando den cuenta de sus experiencias. Lo más importante, es que no tienes porqué preocuparte allí de las reacciones de tu compañera y que estarás con unas personas que entendien realmente de lo que se trata. Para verificar si existe un grupo de apoyo para las parejas en tu comunidad, basta con entrar en contacto con un centro de ayuda a las víctimas de agresión sexual o con un centro de servicio en counseling. Si no existe tal grupo, podrías consultar un sicólogo y preguntar si alguien estaría dispuesto para abrir uno. Otra solución consiste en organizar tu mismo un grupo de apoyo. El libro «Ghosts in the Bedroom » que aparece en la lista de obras recomendadas, más abajo, contiene un capitulo que describe la forma de organizarse para ello.



¿ Qué ocurre cuando mi compañero/a y yo somos del mismo sexo?


Si tu cónyugue y tu sois del mismo sexo, las cuestiones son las mismas, igual que lo son el proceso de recuperación y los princípios que aplicar para brindar tu apoyo a tu cónyugue. Las presiones sobre vuestra relación son también las mismas, suponiéndo que vuestras familias y vuestros amigos respectivos os brinden apoyo desde el primer momento de vuestra relación. Los relatos aquí presentados describen una superviviente con su compañero y luego un superviviente con su compañera porque es lo que más frecuentemente se da en la sociedad pero no por constituir una «norma ».



¿ Qué efectos tendrá en nuestra relación, una curación total ?



La curación tendrá efectos profundos en vuestra relación… En cuando tu compañera pueda recordar la violencia sexual que padeció, entrarádetalles, y es posible que experimente desagradables «flash-backs ». Eso es : imágenes percutantes que sorprendan la memoria. Los flash-backs se producen amenudo en el transcurso de las relaciones y pueden llevar tu compañera a temer vuestras relationes, mientrás las anhelaba anteriormente. Aquello se produce cuando ella asocie vuestras relaciones con los abusos que padeció. Es posible que tu compañera rechace tus tentativas para tener relaciones. Si los abusos infligidos imponían una relación íntima, tu compañera puede llegar a considerar tus intentonas comme amenazas. Podría entrar en pánico y pensar en abandonarte. Podría incluso entablar una suerte de aventura con un hombre con quien estaría segura de no tener que entregarse.Tu compañera podría volverse irritable y empezar a criticar sin motivos tu comportamiento. Si eres hombre y que el agresor lo fuese, podrías ser el objeto de un transfer; dicho de otra manera, tu compañera podría, inconscientemente, empezar a creer que tus actitudes son las del agresor.
 
Podría también ella intentar dominar vuestra relación de manera de poder compensar la impotencia que sufrió en el momento de padecer los abusos. El princípio según el cual hay que llegar a tocar fondo hasta que mejoren las cosas se aplica muy amenudo en los casos de recuperación de las víctimas de violencia sexual. La curación es muchas veces más dolorosas en sus primeras etapas y en esas horas vuestra relación será sometida a prueba. Para curarse de unas heridas por abusos sexual, a veces, hace falta años. Pero la psique tiene una extraordinaria facultad para cicatrizar y, en un tiempo relativamente corto, podrías presenciar los efectos benéficos de la recuperación de tu compañera.

Y entre tales efectos, podemos mencionar algunos muy positivos para la relación : una mayor confíanza mútua, una facultad nueva para vivir y expresar los sentimientos, redescubrir el placer de la atracción sexual, y reencontrar cada uno su aútentico yo, «el niño que está en el fondo de sí».



¿ Qué efectos tendrá el tratamiento sobre nuestra familia ?

El papel de padres

Al princípio, los hijos podrían sufrir del peso de este proceso de recuperación. Van a notar el estrés que estareis aguantando y se preguntarán naturalmente si ellos son la causa de ello. Podreis ayudarles explicando que su madre (o padre) ha quedado perturbada por unos recuerdos de infancia los cuales generan para tí y para ella tristeza e ira. Unos sentimientos que os volverán impacientes e irritables. Dar explicaciones cortas y simples y tranquilizar los niños sobre el hecho que no son para nada responsables de los sentimientos que sus padres están viviendo.

Por otro lado, puede que tu compañera sufra un estrés complementario si se diese el caso de tener ella la edad de uno de vuestros hijos ahora, en la época de padecer dicha violencia sexual. Hay que ser consciente de esta posibilidad y pensarlo mucho antes de comentarlo : vuestros hijos podrían sentirse muy mal y desorientados por ello. Si tu compañera invierte muchas energías en su recuperación y se sentiese agotada, podrías ayudar asumiéndo una mayor parte de responsabilidades hacía los niños y sacarles a divertiros para dejar a tu compañera más tiempo para descansar.

La familia

El proceso de recuperación de tu compañera tendrá efectos sobre vuestros lazos con las familias, más si el agresor es miembro de su familia. Si los miembros de su familia no le han protegido en el pasado o se niegan en creerle en el presente, quizás no querran que les hable de ello. En tal caso, tu papel consistira en ofrecerle un apoyo, cuanto más caso que su familia presione para obtener que ella se retracte.

Si el agresor de tu compañera es miembre de la familia, es también posible que otros miembros de su familia hayan padecido abusos. Así, si tu compañera habla con un miembro de su familia, de esta violencia sexual padecida, su revelación puede provocar una avalancha en el caso que otros varios miembros de esta familia empiecen también a denunciar abusos de qué hayan sido víctimas. Suponiéndo, por ejemplo, que ella haya sido agredida sexualmente por el abuelo y que este haya agredido a sus propios hijos : el secreto hasta ahí guardado desencadenaría las revelaciones de cuantos otros miembros de la familia, sus proprios padres incluso...

Tu compañera es la única que pueda decidir si hablar o callar su agresión sexual ante su familia. Su decisión va a depender de varias circunstancias pero debeis ambos estar conscientes de las reacciones que su familia pueda tener. Tu papel consistira en brindarle apoyo a tu compañera sea cual sea su decisión pero nunca, desde luego, buscar una venganza o querer socorrerla ante ellos.

Tendreis además, también, que decidir si hablar ante tu propia familia de la violencia sexual padecida por tu compañera. Para tomar esta decisión, tendrás primero que interrogar a tu compañera sobre si ella quiere que lo hagais. A continuación, tendreis que reflexionar sobre los efectos que dicha revelación pueda provocar en los tuyos. Si pensais que tu familia os brindará su apoyo, tanto para tí que para ella, entonce podeis contarselo. En contra, si pensais que tu familia pueda demostrar una reacción negativa, no lo comenteis. No debeis explicaciones a nadie, ni siquiera a tu familia.



¿ Hay de verdad « una vida despues » ?


SI, la hay ! Cada pareja conoce altibajos en el momento en que uno de los dos tiene problemas. Lo que crea la diferencia es que los dos cónyugues intenten juntos buscar soluciones. Una experiencia de abusos sexuales puede afectar una relación desde el primer momento aún sin saberlo. Si tu cónyugue te lo comenta, sabes pues en dónde situar el problema y teneis mejores opciones para ir resolviendo las dificultades a medida que se vayan presentando.

La comunicación que vayais a establecer entre vosotros y el apoyo mútuo que vayais a ofreceros durante el proceso de recuperación aumentarán la confíanza entre los dos, de tal forma que podreis hablar de las cuestiones más delicadas con total seguridad. La comunicación es la base más sólida en una relación.

Para poder vivir plenamente tu curación, recuerda estos consejos :
1. Seguiros communicando vuestro amor.
2. Monstrar ternura en vuestros gestos.
3. Ser conscientes de vuestras propias necesidades y límites.
4. Dejar que el compañero/a descubra tus necesidades y límites. Reservate períodos con él o con ella durante los cuales no se abordarán cuestiones de violencia sexual.
5. Divertiros y recordaros mútuamente los motivos por los cuales habeis decididos al principio estar juntos.
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Lecturas recomendadas


Brodie, Faithe. When the Other Woman is His Mother. Tacoma, Wa: Winged Eagle Press, 1992.
Davis, Laura. Allies in Healing. New York, New York: Collins, 1991.
Engel, Beverly. Partners in Recovery, How Males, Lovers and Others Prosurvivors Can Learn to Support and Cope with Adult Survivors of Childhood Sexual Abuse. Los Angeles, California : Lowell House, 1991.
Gil, Eliana. Outgrowing the Pain Together. New York, New York : Dell, 1992.
Graber, Ken. Ghosts in the Bedroom. Deerfield Beach, Florida: Health Communications, 1991.
Hansen, Paul. Survivors and Partners. Longmont, Colorado

FIN
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